Estrenada este noviembre en Chile en plataformas digitales, Yes, God, Yes ( Sí, Dios, sí en español), de la directora y guionista Karen Maine, relata la vida de Alice (Natalia Dyer) y sus primeros acercamientos a la sexualidad en medio de un ambiente familiar y escolar sumamente religioso. El film corresponde a una versión extendida de un cortometraje del mismo nombre, realizado por Maine y protagonizado por Dyer, de 2017.
La película, según Maine, está basada en su propia experiencia como adolescente en una comunidad religiosa y su despertar sexual, por lo que trató de realizarla lo más realista posible. Incluso, agrega que algunas de las situaciones que vive Alice como protagonista, le sucedieron a ella y quiso incluirlas, ya que le resultaban cómicas.
Este intento de la directora por realizar una película en el género del coming of age, donde la protagonista no se transforma en el personaje cool de la escuela o cambia de grupo de amigos para luego darse cuenta de lo equivocada que estaba, la hace más verosímil y crea un relato refrescante de la evolución del deseo sexual de una adolescente, sin el mito de la pérdida de la virginidad, y desde el punto de vista femenino.
Por otra parte, Dyer, conocida por su papel de Nancy en Stranger Things, logra capturar a esa chica tímida e inocente que es Alice, quien va descubriendo poco a poco los secretos de su comunidad y de su cuerpo. Dyer es convincente en su rol de principio a fin, tanto que los demás personajes pasan casi desapercibidos y no tienen tanta relevancia en la historia.
En esta película, Maine logra su cometido y crea una comedia adolescente capaz de hablar de un tema que hace pocos años se consideraba tabú, como lo es la masturbación femenina, de cuestionar la extrema religiosidad y demostrar que, en realidad, “todos estamos tratando de resolver nuestra mierda”, asi que no deberíamos juzgar a nadie por sus acciones o deseos. Disponible en el cine online de Cinemark.
Por Belén Riquelme