La película está basada en la saga de novelas de Alexandra Bracken de nombre homónimo en donde se cuenta la historia de Ruby (Amandla Stenberg, a quien conocimos como Rue en los Juegos del Hambre) una chica a la cual sus padres encierran en el garaje luego de darse cuenta de algo extraño en ella.
Ruby ha sobrevivido a una enfermedad que ha matado al 98% de los niños americanos y junto a los pocos sobrevivientes es enviada a un campo de concentración. Acá van solo los chicos que han seguido con vida gracias a un superpoder que poseen.
Ciertamente la película promete, al igual que la gran mayoría de films que han sido llevados a la pantalla grande tras el éxito obtenido en el mundo literario. Sin embargo, sinceramente, momentos importantes de la película parecieran ser sacados de una serie de historias conocidas y parte del argumento se vuelve un tanto predecible. Sin embargo, se destaca la química entre los actores y los escenarios en los cuales se ve desarrollada la trama. Los efectos visuales también juegan un papel fundamental y son interesantes de ver.
Las casi dos horas se justifican al momento de entender como los chicos han llegado a donde están y las ganas de saber que sucederá quedan en el espectador, lo cual es un punto a favor para Mentes Poderosas.
Actualmente no hay alguna saga popular que esté a medio camino o por culminar, es por ello, que en resumidas cuentas esta obra, dirigida por Jennifer Yuh Nelson, es la nueva apuesta adolescente que busca llegar a los jóvenes bajo la premisa de un éxito de ventas en el mundo de los libros. Lean el libro y vean la película.
Por Grace Aravena