Si ya les daba miedo meterse al mar porque pueden salir con un pañal sucio atrapado a un pie, después de ver Megalodón se les van a quitar absolutamente todas las ganas: Un mega tiburón prehistórico de sopotocientos pies de largo está acechando básicamente todas las costas del mundo (particularmente las chinas) y ya probó la carne humana y le supo rico.
Jason Statham llega en una super-producción que se desarrolla en la mitad del mar. A doscientas millas de las costas chinas, un grupo de investigadores expertos en biología marina, junto con un millonario muy codicioso, han descubierto que el fondo de mar quizás no es exactamente el fondo del mar. Es decir, que debajo de lo que creemos que es el límite existe todo un ecosistema submarino esperando para… comernos a todos. Entre ellos, el Megalodón ¿Extinto? No lo creo.
Jason, mejor conocido como Jonas Taylor en la película, es un ex buzo de rescate que ya se ha encontrado cara a cara con el monstruo prehistórico, pero nadie le creía… hasta que cuatro de los investigadores se topan frente a frente con el Meg (por cariño) y necesitan a la única persona que lo ha enfrentado y ha salido viva. Sí, Jonas (Que ahora que lo pienso es como Jason, pero reordenado).
¿Qué no esperar? Que el Meg llegue muy rápido a la costa, que se muera Jonas, ir directo a la acción, un grupo de expertos muy clever a los que se les ocurra usar bombas de alto calibre al comienzo (porque eso habría sido muy fácil, ¿no, Jonas?). La primera partes es bastante explicativa. Al final uno sale con una sensación buena, pero es bastante más por el final que por el comienzo.
¿Qué esperar? Una película de acción good old-fashion Jason Statham, con explosiones y cosas que van rápido y escenas de alta tensión. Particularmente en la segunda parte de la película (sabrán cuál cuando lleguen ahí) porque hay más Meg y más gente siendo comida, que es más o menos la idea de ir a ver una película de tiburones. También mucha onda de Tiburón (1975)… porque bueno, es Tiburón, pero prehistórico. Menos mal es invierno y falta un rato para volver a la playa. Cabe destacar que la película está basada en la novela de Steve Alten.
Por Adriana Villamizar
