La nueva película de Matías Bize cuenta la historia entre dos amantes dominicanos, pero llevándolo al plano más íntimo posible. No hay grandes diferencias de locación, ya que todo ocurre en un departamento. No hay otros personajes en pantalla, pues todo se resume a la relación que la pareja construye desde la sexualidad, pero una que evoluciona con una delicadeza que viene a enfrentarse con un montón de prejuicios en torno al tema.
Hablar de infidelidad desde un lado tan cercano y dándose el tiempo de incursionar en las distintas etapas un amor que no puede consumarse por completo es una premisa que está muy bien lograda por el director, junto a la indispensable dupla protagónica de Eva Arias (Julia) y Josue Guerrero (Manuel). Ellos son capaces de conseguir una química que tiende a ser orgánica, con personajes que nunca llegan a ser desagradables y que comparten un vínculo que sobrepasa al sexo. Abundan diálogos casuales que les permiten conocerse y conectarse en el transcurso de una relación que explota en intensidad con cada vez más fuerza, y es la estabilidad emocional de Julia reflejada en constantes miradas y silencios la que dará pie a un conflicto que puede parecer invisible, pero que consigue un desenlace poderoso.
Su duración acotada es la adecuada, ya que el carácter simple y encerrado en el mundo de Julia y Manuel no necesitaba de más, aunque el énfasis en sus escenas de sexo sí pueda incomodar a algunos. Al menos en mi caso fue algo que me hizo ruido en la primera media hora al no tener claro hacia donde iba la película, pero no pasa mucho tiempo hasta que se entiende esa belleza puesta en lo que nos hace personas, en la forma de enfrentar la pasión en una relación prohibida, y con el cariño honesto como su mayor fortaleza. Matías Bize es capaz de impregnar un encanto particular a esta historia en el descubrimiento del amor, se siente tan humana como la vida misma, de ahí lo interesante que tiene la película en la forma de plasmar una infidelidad en una manera que no suele verse a menudo. Pueden ver En tu Piel en los principales cines de nuestro país.
Por Andrés Leiva