Una mujer solitaria en sus cuarenta decide comprarle alcohol a un grupo de adolescentes. Se hace amiga de ellos, les presta el sótano de su casa para irse de fiesta sin que sus padres y/o la policía los pille (sospechoso, ¿no?). Ma, es el nombre de la aterradora protagonista, la cual es encarnada por Octavia Spencer bajo la dirección de Tate Taylor. Ambos como dupla se conocieron en The Help, película por la cual Spencer ganó el Oscar a mejor actriz de reparto. Que hayan vuelto a trabajar en este thriller de terror llama mucho la atención.
En una mirada general, se puede observar en los tres actos que existe una intención de reinventar a la figura del villano, pero sin tomarse muy enserio. Guiños a Misery o Carrie, son visibles durante el filme, pero no logra salirse del homenaje para intentar algo nuevo. En términos más estructurales, el guion logra partir con fuerza con la puesta en escena y con la entrada de Ma. Pero es a medida que avanza la historia, que se puede observar cómo el guion termina siendo un desorden, con personajes secundarios clichés y sin desarrollo real, donde mientras se fuerce a la narrativa a funcionar no importa el costo.
Es en el tercer acto que todo se desinfla y queda a medias. El personaje de Ma no termina por construirse o consolidarse, siendo que apuntaba a ser algo especial. Las acciones son predecibles, el final en sí parece un chiste fome después de todo lo que se estuvo construyendo. La expectativa se pierde y solo queda esperar a que termine. El sentido común acaba siendo algo tan fantástico como un unicornio. Me recuerda a esos avisos de “No confíes en los extraños”.
Lo más destacable es la actuación de Spencer, la manera en que puede aparentar un rol maternal, pero al mismo tiempo asesino es increíble. Escenas como un asesinato, al son de la canción September de Earth, Wind & Fire, son disfrutables si tenemos a la actriz detrás del cometido. Pese a la falta de costumbre en verla en un papel de esa naturaleza, su desplante es lo que finalmente vuelven de Ma un terror divertido, curioso y hasta terrorífico en un nivel menor. Por lo que, si buscan reírse y asustarse con dosis de gore, esta es su mejor apuesta.
Por Constanza Lobos