Estimados Lectores, a continuación les presentamos una nueva entrevista. En esta oportunidad conoceremos más sobre el escritor chileno León de Montecristo, autor del libro de fantasía épica "El último Rey. Codex Draconis 1".
León de Montecristo. (Chile)
Muchas gracias León por acceder a responder las preguntas.
Aquí está la entrevista para que conozcan lo que nos contó.
Aquí está la entrevista para que conozcan lo que nos contó.
Supongo que un personaje más dentro de mi carrera literaria. “León de Montecristo” es el seudónimo que
he usado durante mucho tiempo para presentar al mundo exterior mi universo imaginario. Pero detrás de la
máscara hay un escritor que se aferra a sus sueños de infancia y que disfruta mucho volviendo a ellos, cual si
de una máquina del tiempo se tratase.
2.- ¿Cuándo nace la inquietud de comenzar a escribir y cuál es el género qué más te
acomoda?
Empecé a escribir en una época tan temprana, que casi no tengo recuerdos de una vida sin la literatura.
En mi niñez, eso sí, no escribía ficción, sino sobre lo único que me apasiona hasta el día de hoy más que
escribir: la fauna prehistórica. Yo mismo hacía los dibujos (era lo que más me gustaba), así como las reseñas
y descripciones de cada dinosaurio, igual que en una enciclopedia ilustrada. Visitar al pasado se transformó
en una entretención recurrente a partir de entonces. Solía fantasear que tenía una máquina del tiempo y que
ésta me permitía viajar a la prehistoria, a la antigua Roma, a civilizaciones perdidas, a mundos medievales
plagados de dragones o a un futuro apocalíptico. Cuando esos juegos pasaron al formato escrito tuve mis
primeras historias, ninguna de las cuales, en todo caso, pasaron de ser los textos de un aprendiz.
3.- ¿Qué momento del día dedicas a escribir y cuál debe ser la atmósfera perfecta?
Aprovecho cada momento, por pequeño que sea. Lo importante para mí es escribir todos los días. Para no
matar el “glamour” me gustaría poder decir que sólo lo hago de noche y a la luz de las velas, como Lovecraft,
pero no: sólo me hace falta música. Un sonido envolvente crea la atmósfera necesaria para aislarme no sólo
al escribir, sino también en el proceso creativo en general. Escribir es sólo el último eslabón en la cadena.
El resto se da en cualquier momento en que estoy despierto y, con auriculares en el oído, mi mente regresa
a mis mundos imaginarios. Y a veces ni siquiera necesito música para aislarme: basta que se me ocurra
alguna nueva idea para echar a volar la mente, cuestión que, por supuesto, me trae algunos problemas en lo
cotidiano.
4.- ¿Qué significó para ti ver tu primera novela publicada?
La que haces parece una pregunta fácil, pero la emoción está tan cerca que no sé si todavía soy consciente
de lo que significa publicar un libro. Ante todo, es una emoción indescriptible. Han pasado diecinueve años
desde que comencé a escribir “El último rey”, así que ver en vitrina un sueño que he arrastrado por tanto
tiempo, representa no sólo un logro, también un premio a la paciencia y a la perseverancia. A veces siento
que no es real, que todavía estoy soñando. Dos meses después de su publicación, aún me sorprende y me
hace feliz descubrirlo en librerías, tal como cuando lo vi la primera vez. Sin embargo, yo espero que sea
apenas el comienzo, y no bien fue publicada esta, mi primera novela, comencé a trabajar en el siguiente
proyecto.
5.- ¿Dónde nace “El último rey”?
Nació en mis años escolares, luego de la lectura de “Las crónicas de Narnia”. Esa saga supuso para mí el
descubrimiento de la fantasía como género, y me abrió puertas hacia infinitas posibilidades como escritor:
un mundo completamente creado por su autor equivalía a un sinfín de historias para contar, creí entonces
que podría pasar la vida entera explorando esos universos sin alcanzar sus límites. Entonces me concentré en
la creación de mi propia historia de fantasía, y esta emergió, como ya anticipé en otra pregunta, de la mano
de mi gran aliada en lo creativo: la música. Llegó a mis manos el que se transformaría en uno de mis discos
favoritos, “Eldorado, A Symphony By The Electric Light Orchestra”, cuyo sonido mágico y envolvente no tardó
en inspirarme. Han pasado muchos años desde entonces, y muchos elementos nuevos se han incorporado al
argumento de la historia original tornándola casi irreconocible, pero la novela conserva en esencia lo que esa
saga fantástica y ese disco inspiraron.
6.- ¿Cuál fue tu principal fuente de inspiración a la hora de escribir “El último rey”?
Cuando un autor demora casi veinte años en escribir su obra, no creo que pueda hablar de una única fuente
de inspiración. Han pasado muchas cosas en mi vida en esos veinte años y cada una de ellas me ha marcado.
Ya he mencionado la música y la obra de C.S. Lewis. Pero cada nuevo autor de fantasía que conocía, así como
cada nueva experiencia de vida que incorporaba en mis recuerdos, todo me ayudaba en mi proceso creativo.
El acto de escribir, para mí, ha sido una necesidad, un escape, una inspiración en sí mismo. Al final, se reduce
a la siguiente premisa de vida: buscaba escribir el libro que siempre quise leer. En los últimos diez años, sin
embargo, yo escribía para alguien: mi novia, que a la larga se transformaría en mi mujer. Ha sido mi lectora
y crítica más fiel. Escribía para sorprenderla.
7.- ¿Para qué tipo de público va dirigida tu obra?
Es curioso pensar hoy en ello. Al principio, por cierto, como escribía “el libro que siempre quise leer”, pensaba
que mi “público objetivo” eran lectores de mi edad a los que le gustara la fantasía, o sea, de unos veinticinco
años (mentira… tengo treinta y seis). Después, por la complejidad de la trama, supuse que no querrían leerla
lectores de menos de quince años o que difícilmente le interesaría a lectores que sobrepasasen los treinta y
cinco. Pero, tras la publicación me llevé dos sorpresas. La primera, que el primer lector en acabar y comentar
mi novela, declarando que le gustaba, fue el hijo de mi editor, quien tiene sólo doce años. La segunda, que
varios de los siguientes comentarios que he recibido últimamente, con opiniones favorables sobre mi libro,
pertenecen a personas de la generación de mis padres, es decir entre cuarenta y cinco y sesenta años.
Aprendí, pues, que era un error de mi parte tratar de adivinar la edad apropiada para los lectores de mi obra
o encasillarlos de ningún modo, ya que, en un caso, los subestimaba a ellos, y en el otro subestimaba mi
propia novela. Muchos de ellos ni siquiera habían leído fantasía antes, además. Creo que es una novela que
puede disfrutar cualquier persona a la que le guste leer.
8.- ¿Cuál es el personaje sobre el que más te gustó escribir?
Sobre Eähsel Avinnicia. Me gusta la transformación que opera en ella, pasando de ser apenas una niña a una
reina todopoderosa. Es un personaje que no goza de magia ni de superpoderes, y que, sin embargo, se hace
respetar. Es inteligente y calculadora cuando debe serlo, pero no por ello deja de ser mujer. No la vas a ver
resolviendo las situaciones críticas del libro con una espada. Ella tiene algo que la hace muy superior: tiene
astucia y es osada. Es un personaje terrible y fascinante a un tiempo.
9.- ¿El libro es único o tendrá continuación? ¿Nos puedes contar un poco?
Aunque “El último rey” es una novela autoconclusiva, no pude escapar al “cliché” de hacer una saga. No
fue a propósito: después de un tiempo la trama fue creciendo más allá de mi control, y pronto exigió una
continuación para ser desarrollada adecuadamente. Luego, había que hacer un desenlace. He visto en varias
partes que se habla de “la trilogía del Codex Draconis”, pero, en verdad, se trata de una tetralogía: al libro
publicado, deberían seguirle: “El dragón y la doncella”, “El sacerdote de los muertos” y “La noche eterna”.
Estoy ya trabajando en el segundo libro, en el que continúo la historia a partir de los acontecimientos en
que culmina el primero. La cuarta entrega es la que ata los cabos sueltos y pone fin al argumento en torno
a los tres elementos sagrados de Drakar. Pero el que me parece más interesante es el tercer libro, pues en
él el relato dará un salto en el tiempo hacia el pasado de ese mundo. Sólo entonces los cuatro libros en su
conjunto cobran sentido y se entienden plenamente.
10.- ¿Nos puedes contar sobre tus futuros proyectos?
Junto con trabajar en los siguientes libros de la saga, tengo en mente varias ideas que colindan más con
la ciencia ficción que con la fantasía. No estoy tan seguro sobre si saldrán bajo la forma que actualmente
estoy explorando, la novela, o si los desarrollaré en el formato cuento. Tengo prácticamente acabada una
novela de suspenso y ciencia ficción en torno al hallazgo, por parte de un par de antropólogos alemanes, de
un fósil cuyo origen podría cambiar el curso de la historia humana conocida. Espero que durante 2013 pueda
adelantar más al respecto. También tengo en mente un par de novelas históricas que nada tienen que ver ni
con la fantasía, ni con la ciencia ficción. En el fondo, sigo explorando los universos perdidos de mis juegos de
infancia.
11.- ¿Por qué todos deberían leer el libro?
No sé si deberían. Sólo si eres familiar mío “deberías” leerlo… por último para que te mencione en mi
testamento. Para los demás, mi novela no es muy diferente de las demás: es una invitación. Una invitación a
subir a mi máquina del tiempo, a liberarse por un momento del mundo real, a disfrutar de un libro que yo, al
menos, he disfrutado muchísimo escribiendo. He puesto mucha energía, pasión y trabajo en él, he tratado de
ser cuidadoso en los detalles. No pretendo haber creado la quintaesencia de la literatura, ni siquiera dentro
del género de la fantasía épica, lo único que espero es que el lector pase un buen momento con el libro y se
sorprenda, tal como alguna vez se sorprendió mi mujer. Por eso pienso que no va a defraudar ni al lector
ocasional, ni al fiel lector de fantasía.
12.- ¿Sobre qué te gusta leer? ¿Cuáles son tus autores preferidos?
Me gusta leer libros de historia. Me ayudan en mis travesías imaginarias. Pero, en lo que a ficción se refiere,
mis preferencias por ahora son los libros de fantasía y ciencia ficción. Mis favoritos son J.R.R. Tolkien, Tad
Williams, H.P. Lovecraft, Ray Bradbury e Isaac Asimov. No obstante ello, no me limito a ningún género al
momento de leer, disfruto cualquier novela que me parezca buena o que alguien me recomiende. Pienso
que todo relato merece un lector. Todo relato, potencialmente, puede llenar tu alma, pues a pesar de las
diferencias y de la diversidad todos los seres humanos somos iguales en esencia. Tan sólo atravesamos
distintas etapas de búsqueda. Siempre hay algo ahí afuera esperando sorprendernos. Siempre hay un libro
que está preguntando por nosotros.
13.- ¿Qué les dirías a los lectores que aún no disfrutan de “El último rey”?
Que le pregunten a quienes ya lo han leído cómo les ha parecido la novela. La mejor referencia de todas es la
que te da otro lector. Mi propia recomendación es poco objetiva para ser válida. Una ayuda puede ser leer el
primer capítulo, que está circulando gratis en Internet. Al fin y al cabo, ¿qué mejor referencia que la idea que
el propio lector se forme de la novela leyendo sus primeras páginas? Los invito a leerla.
Muchas gracias a León nuevamente.
Espero que hayan disfrutado la entrevista.
Hasta la próxima.