Esta semana se estrenó en nuestras salas de cine la película A dos metros de ti, un drama romántico adolescente que sorprende con su trasfondo y el mensaje que busca entregarle al espectador. La película está dirigida por Justin Baldoni (Para el que ha visto la serie Jane de Virgin, es quien interpreta a Rafael) y el guion estuvo a cargo de Mikki Daughtry y Tobías Iaconis. En su elenco se encontrarán con Haley Lu Richardson (Split) y Cole Sprouse (The Suite Life of Zack and Cody) quienes le dan vida a los protagonistas de la historia. Les advierto desde ya que lleven pañuelos desechables, es imposible no emocionarse con la historia de Will y Stella. Cabe destacar que a raíz de la película también se publicó la novela de la escritora Rachael Lippincott que ya está en librerías.
Primero conoceremos a Stella (Haley Lu Richardson), una chica que lucha a diario con una enfermedad que la acompaña desde pequeña, la fibrosis quística (FQ), la cual afecta sus pulmones y por lo mismo constantemente debe ingresar al hospital, es aquí donde conoce a Will (Cole Sprouse), un chico que también está enfermo. Stella quiere vivir y se esfuerza por eso, pero Will es todo lo contrario, no le interesa seguir su tratamiento, Stella tratará de hacerlo cambiar de opinión a la vez que comienza a crecer el amor entre ellos, pero hay un inconveniente… Stella debe mantenerse alejada de cualquier persona que pueda transmitirle una infección, una de esas personas es Will, por lo que siempre deben mantenerse a dos metros de distancia, esa regla no se debe romper.
Así es como surge el drama y la gran pregunta ¿Y si no pudieras tocar a los que más amas? la dificultad de mantener vínculos o una relación amorosa cuando te ves obligado a mantenerte a metros de distancia, habla acerca del amor no correspondido, de lo frágil que puede llegar a ser la vida y de la importancia de poder tocar a otra persona.
Cuando conocemos de qué va la historia quizás se les venga a la mente la película Bajo la misma estrella, si bien la temática es parecida, la trama se diferencia bastante, sobre todo en el trasfondo, que es la importancia del contacto humano y que desde el comienzo nos hace ver la protagonista, lanzando en algún momento esta frase: “Nunca entendí lo de hacer contacto, hasta que no pude tenerlo”.
La película engancha de principio a fin, la química entre los protagonista se respira y la banda sonora es un acierto, sin duda esta película conseguirá tocar la fibra de todo el público. Pero no todo es drama y lágrimas, también sus protagonistas nos sacan varias sonrisas.
A dos metros de ti se sostiene en los hombros de sus protagonistas y son las actuaciones de Richardson y Sprouse, con una química innegable, que logran sacar adelante la trama, interpretaciones increíbles que hacen que el espectador sienta cada una de sus emociones y finalmente sienta empatía por ellos. Los personajes secundarios también logran robarnos un pedacito del corazón, como, por ejemplo, Poe (Moisés Arias), el mejor amigo de Stella, un chico que inspira ternura y nos provocara varias emociones.
Como un cúmulo de emociones podríamos describir finalmente esta película, y les recomiendo leer la novela, ya que así entenderán mucho más a sus personajes y se encontrarán con alguna que otra escena que los sorprenderá.
A dos metros de ti es una película que hará reflexionar tanto a adolescentes como adultos acerca de la importancia de aquellos que tenemos a nuestro alrededor y de aquellos a quienes amamos. ¡No se la pierdan!
Por Camila Toro F.
