Con gran alegría hoy les hablaré del estreno de Atómica (Atomic Blonde), protagonizada por Charlize Theron (Mad Max: Fury Road) y James McAvoy (X-Men). Dirigida por David Leitch, productor de John Wick 1 y 2. La película está basada en la novela gráfica “The Coldest City” por Antony Johnston y Sam Hart.
No les mentiré mi entusiasmo por ver a una mujer pateando traseros en la época de la guerra fría junto con la caída del Muro de Berlín, fue infinito. Sobre todo, considerando que Charlize Theron ya tiene vasta experiencia con ser bad-ass.
No les mentiré mi entusiasmo por ver a una mujer pateando traseros en la época de la guerra fría junto con la caída del Muro de Berlín, fue infinito. Sobre todo, considerando que Charlize Theron ya tiene vasta experiencia con ser bad-ass.
La historia transcurre en la ciudad de Berlín, a días del colapso del muro. Los constantes roces entre la bipolaridad de las alianzas van a explotar. Lorraine Broughton (Theron) es una espía de primer nivel del MI6. Es a ella a quien le encargarán la misión de descubrir y asesinar al espía secreto que acaba de matar a un colega, que se encontraba clandestino y escondido en la capital de Alemania. Ahí tendrá que formar un cierto tipo de “pacto de trabajo” con el encargado de Berlín, David Percival (McAvoy) para cumplir su misión.
Desde el principio la película nos sumerge en el Berlín de la guerra fría con un soundtrack al más puro nivel de Guardianes de la Galaxia. Tiene tal tremendo setlist de canciones que cada escena, diálogo y golpe van de la mano con música icónica y nostálgica.
La actuación de Charlize Theron deslumbra siendo la intricada y fría espía del MI6. Haciendo desplante de las secuencias de acción sin parar junto con el gran trabajo de realismo que tienen los encuentros. Cada pelea se disfrutaba y tenía al espectador al borde del asiendo del cine, la adrenalina fluía.
La dirección de arte de la película es hipnótica, la visión de Leitch sobre las dos caras de Berlín, la del día con protestas y la de noche en bares forman un intenso contraste.
Aunque me pasó que en el guion encontré varias fallas, tales como los típicos hoyos de la trama o el exceso de detalles que al final son abandonados a mitad de película. Creo que, por momentos, la obra de Leitch quiso abarcar mucho y no lo logró, volviéndola difusa y un poco predecible.
Pese a que Atómica no sea perfecta, sí es una película que, para los amantes de la acción, espionaje y de películas como John Wick o James Bond, tiene su propio mérito que merece toda la atención del mundo.
Y obvio, mención de máximo honor a la escena apasionada de Theron con la actriz Sofia Boutella, que no solo fue emocionante de ver, sino que también fue un golpe de diversidad al típico hombre con mujer, que se ve en este tipo de películas. Sin más que decir, Atómica es Charlize Theron + acción y buena música. ¿Quién no querría ver eso?
Por Constanza Lobos
