[Reseña Netflix] Atypical (Segunda temporada): Imposible no verla de una sentada

Tan buena fue la recepción por parte de la audiencia que Netflix decidió darle la oportunidad a una segunda temporada de Atypical, serie que nos cuenta la historia de Sam, un chico de 18 años que tiene un trastorno del espectro autista.

En la primera temporada conocimos a este chico que es sumamente lógico, no es bueno en entender las señales de otros, le molestan los lugares muy ruidosos, no mira a las personas a los ojos, le cuesta socializar y un sinfín de cosas más que lo hacen ser bastante atípico ante la sociedad.

Esta es una producción de Robia Rashid co-productora de How I met your mother, junto al productor y ganador de la Academia Seth Gordon. Protagonizada por Keir Gilchrist interpretando a Sam, Jeniffer Jason como su madre, Michael Papaport como el padre, Brigette Lundy-Paine como su hermana y diversos actores secundarios que se ganaron nuestro corazón en la primera temporada. En esta segunda conoceremos a otros personajes importantes y seguiremos siendo espectadores de los acontecimientos en el núcleo familiar de Sam.

Ya habíamos sido testigos de cómo Sam comienza un auto descubrimiento y busca independizarse para descubrir por sí mismo el mundo. En los diez capítulos que tiene esta segunda temporada la trama sigue esa misma línea y como muchos se habrán dado cuenta, Sam al ser tan atípico también lo es su familia y sus conflictos, pero en esta oportunidad, además de ver a los conflictos a los que se enfrenta Sam y su familia a causa de su condición, vemos también conflictos familiares que podrían suceder en cualquier familia, esas crisis que muchas veces son comunes pero no dejan de ser complicadas y ser escenarios en donde muchos se podrían sentir identificados.


En cuanto a los personajes, vemos como cada uno de ellos se va desarrollando, los roles de los padres de Sam dan un nuevo giro y ahora es el padre del protagonista quien asume nuevas tareas y la madre de este se centra en reivindicarse y reconstruir a la familia sea como sea .

Un personaje que se ganó el corazón de muchos es Casey, la hermana del protagonista, esa chica dispuesta a defender a su hermano y que lo ama por sobre todas las cosas, ahora la veremos siendo más independiente y descubriéndose a sí misma, lo que se agradece, ya sabrán el por qué, no quiero spoilearlos debido a que se sorprenderán con los giros inesperados en la vida de esta chica.

Esta es una serie que tiene de todo, tiene su toque cómico, lo que es capaz de sacarnos varias carcajadas en cada capítulo, su toque enternecedor, es imposible no emocionarnos con las ocurrencias de Sam y los de su entorno y también esta lo dramático, lo que le otorga ese realismo a la serie al momento de mostrarnos como es la vida de una persona con este trastorno y la de su familia.

Atypical busca, además de entretener,  concientizar y enseñarnos a ser más tolerante con lo diferente, trata de hacerlo en cada uno de sus capítulos al mostrarnos los lazos de amistad que Sam va formando, esa amistad incondicional que le brindan sus amigos, el apoyo de su familia y como buscan fomentar que la sociedad entienda el trastorno del protagonista. 
Quiero destacar la magnífica interpretación de Keir Gilchrist, que invita al espectador a ser empático y ser tolerante a la vez que nos enseña que el autismo no es una enfermedad, es una condición.

En definitiva, esta es de aquellas series que se agradecen, una que todos deberían ver para comprender esta condición que cada vez se hace más visible. Nos habla de que nadie puede ser perfecto, de lo difícil que es ser rechazado cuando a fin de cuentas todos deberíamos ser entendidos y amados.

El final de temporada es abierto, así que esperemos saber más de las aventuras de Sam, su familia y amigos. ¡No se pierdan Atypical! Es de esas series que te la pasas bien viéndola y la terminas disfrutando de principio a fin.

 Por Camila Toro F.