[Reseña cine] En Tránsito: Un cuerpo en movimiento

De la mano de Productora Inefable, con el apoyo de la Universidad Mayor y distribuido por DCI. Hoy llega a exhibirse el documental En Tránsito.

En poco más de una hora, el documental de la directora Constanza Gallardo Vásquez, consigue una narrativa que logra evocar qué es ser trans. No hablo solo del indignante proceso de cambiarse el nombre y el género, si no que En Tránsito logra evocar la humanidad que día a día pierden a causa de la discriminación y violencia.

Los protagonistas son Mara Rita, Matías Reyes, Patricia Retamal y Gis Jordan. Los cuatro caminan, conversan; todos son el reflejo de querer vivir, de las dificultades que conlleva ser aceptados. Tienen una lucha constante que no pueden abandonar.

La Encuesta T es la primera encuesta para personas trans y de género no conforme aquí en Chile. De acuerdo con los resultados de la implementación de ésta en el 2017, se mostraron cifras alarmantes. Entre los números, un 55,2% declaró haber tenido algún intento de suicidio en su vida, siendo un 83,6% el que pensó hacerlo entre los 11 y 18 años.

En Tránsito es un llamado directo de atención, no podemos deshumanizar y humillar a personas que piden lo mínimo: ser ellos mismos. A través de, relatos intercalados entre una persona y otra, nos guían hacia una historia de amor, dignidad y respeto.

Desde el punto de vista adolescente de Matías Reyes a la adultez de Patricia Retamal, la película nos permite ver la introspección que ellos han tenido, mientras ésta provoca en el espectador una sensación entre pena y rabia.

Pena y rabia porque, muchas historias como estas no vieron ni verán la luz, las personas necesitan cambiar y ver documentales como el presente. Al final todos queremos lo mismo, querer y ser queridos. Nada nos diferencia uno del otro. Cuando ellos no conversan con la cámara, la voz de Monserrat Ovalle llena el silencio con poemas tan humanos como dolorosos.

El documental ha sido seleccionado en diferentes festivales desde Santiago Lab de SANFIC a el Festival de Cine Latino de Toulouse en Francia. Incluso ganó el premio a Mejor documental Internacional BioBio Cine de este año, entre otras menciones.

Por Constanza Lobos